martes, 28 de octubre de 2014

Miembro de la Asociación Chilena del Método Feldenkrais

 Kinesióloga, titulada en Alemania el año 1984, he trabajado ininterrumpidamente en mi profesión, realizando constantemente cursos y talleres de perfeccionamiento y actualización.
Magíster en Didáctica de la Educación Superior (Universidad de Tarapacá).
Docente, Jefa de Carrera de Kinesiología (2006 - 2010) en el Instituto Profesional Iplacex, donde diseñé la malla curricular de la carrera, entre otras funciones, donde uno de los principales objetivos fue  incorporar en los futuros kinesiólogos la importancia de la Kinesiología y la relación entre ella y todas las especialidades médicas.

Al conocer el método Feldenkrais el año 1996, participando en un taller de Margarita Reifschneider, profesora acreditada en el Método, descubrí en él una herramienta increíblemente eficiente en el tratamiento y la prevención de muchas de las dolencias con las que llegan los pacientes a tratamientos kinésicos.

En Chile no se ha podido aún realizar una formación de profesionales del Método, lo que significa que cada profesional ha tenido que formarse en el extranjero, como por ejemplo Brasil, Argentina, Estados Unidos, Israel, Colombia, etc., existen además profesionales chilenos que viven en el extranjero pero que desean ser parte de la organización chilena.

Comencé a hacer mi formación como profesional del Método el año 2012 en Brasil, con profesores maravillosos (tener a Jerry Karzen; alumno, asistente y amigo de Moshe Feldenkrais es un privilegio que valoro altamente, pienso que lo que Jerry nos entrega, tanto de la herencia de Moshe Feldenkrais como de su propia experiencia, tiene un valor agregado que es imposible de calificar, tener a Hans Machado como intérprete es también un privilegio, el dominio de las materias de las cuales el es conocedor profundo, convierte  mágicamente, una clase difícil en una divertida y a veces poética experiencia), y con compañeros jóvenes increíblemente respetuosos y cálidos, dispuestos siempre a ayudar y compartir,  ha hecho de esta experiencia uno de los momentos mas importantes de mi vida profesional.

La manera de ver a la persona en su totalidad funcional; sin imponer cánones posturales ni funcionales, dignificando las posibilidades, los tiempos, los ritmos de cada cual, casi en un total silencio en los tratamientos individuales, o en una algarabía momentánea o silencio receptivo y perceptivo en otros momentos de las clases grupales, dando tiempo a la persona para el descubrimiento de opciones de movimientos pero dejando que cada cual encuentre el cómo, el cuándo y el desde qué parte de mi cuerpo realizarlos; transforma la clase en una experiencia especial, en la cual la persona descubre, aprende, re-aprende o recuerda movimientos olvidados o escondidos por los hábitos.
El modo gentil, suave, respetuoso y amigable que enseña el Método Feldenkrais para tratar con las personas, convierte al profesional del Método Feldenkrais en un instructor insuperable en el conocimiento del movimiento del ser humano.
Por todo esto es que me he transformado en una Kinesióloga al estilo Feldenkrais.
Los invito a descubrir lo que eso significa.